Por supuesto que sí y acá en Organic Nums te contamos cuáles son los principales beneficios a la salud al consumir nuestros productos orgánicos.

 

Si ya eres un asiduo consumidor de productos orgánicos ¡felicitaciones!, vas por buen camino para tener un organismo más saludable.

Además, con el consumo de productos orgánicos, ya eres parte de los valores ambientales que estos generan. Estás más saludable y estás participando de cuidar nuestro entorno de manera sostenible y responsable.

Si aún no te decides completamente por lo orgánico, pues acá te contamos varios elementos que puedes analizar para que termines de tomar una decisión.

Somos lo que comemos

La calidad de un alimento comprende atributos que el consumidor valora a la hora de elegirlo, siendo la inocuidad el atributo implícito del que no se puede prescindir.

La característica principal de los productos orgánicos es que su proceso de producción está libre de plaguicidas y fertilizantes químicos. Son productos libres de hormonas, antibióticos, colorantes y saborizantes artificiales.

Además de ofrecer productos que traen beneficios para la salud al ser humano, colabora con detener significativamente daños al medio ambiente y a la tierra de cultivo.

Abarca aspectos nutricionales, sensoriales, métodos de producción y elaboración, origen, aptitud funcional y tecnológica.

Puede deducirse que diferentes métodos de producción de un alimento dan como resultado diferencias en la calidad de este. Es así como los alimentos producidos bajo sistemas de producción orgánica poseen atributos de calidad distintos a los que provienen de sistemas convencionales.

La explicación reside en el manejo del sistema productivo en su totalidad, que busca no generar externalidades negativas ni para el medio ambiente ni para la salud del consumidor, mediante el cuidado de los recursos y la prevención como principio clave.

Más cantidad de antioxidantes

Durante la última década, diversidad de gobiernos e instituciones dedicadas a la investigación de la industria alimenticia, han generado una cantidad considerable de estudios que determinan la calidad de los alimentos generados a través de procesos orgánicos.

Entre las investigaciones recientes destaca el European Project Quality Low Input Food (QLIF) que, con el impulso y la financiación de la Unión Europea, revisó y analizó las últimas investigaciones en el área de la producción orgánica y de bajo insumo, tanto vegetal como animal.

Entre los resultados más sobresalientes destacan que las frutas y las verduras orgánicas tienen hasta un 40% más de antioxidantes que los vegetales convencionales.

Otros ensayos anteriores corroboran este dato, al encontrar entre un 10% y un 50% más de compuestos antioxidantes (flavonoides, polifenoles, glucosinolatos).

Para la leche, producida bajo estándares orgánicos, los hallazgos son sorprendentes: se constata hasta un 60% más de ácidos grasos saludables, como el omega 3 y el ácido linoleico conjugado (CLA), una cantidad notablemente superior a la detectada en otros ensayos (entre el 10% y el 60%).

Las hortalizas de hoja tienen entre un 5% y un 90% más de vitamina C, y el contenido de proteínas de los cereales de grano orgánico es entre un 10% y un 12% superior.

Otros experimentos han hallado que los productos orgánicos tienen mayor contenido de materia seca (20% de media), que en términos relativos significa una mayor concentración de nutrientes por porción de alimento. Comer alimentos orgánicos equivale a comer una porción extra de fruta y verduras al día, en referencia a su mayor contenido en antioxidantes.

Los carbohidratos, hidratos de carbono o glúcidos, son un grupo de macronutrientes, compuestos por carbono (C), hidrógeno (H) y oxígeno (O), que aportan energía al organismo. Algunos ejemplos son los azúcares, los almidones y la fibra. Varias investigaciones coinciden en que las frutas y verduras orgánicas presentan mayor contenido de azúcares totales que los convencionales.

Notables diferencias

Como podemos darnos cuenta, tener ninguna o una menor ingesta de alimentos que integren sustancias sintéticas en sus diferentes procesos, permiten que nuestro organismo esté libre de sustancias dañinas, en paralelo, nuestro entorno resulta menos afectado, se utiliza menos energía en la síntesis de los químicos residuales y la calidad de los suelos y del agua puede ser garantizada.

En conclusión, cuerpo y ambiente son los ganadores principales con la producción de alimentos orgánicos. Si queremos llevar una vida saludable no tenemos mucho qué pensar al momento de hacer nuestra elección.

También es bueno recordar que un organismo saludable es el resultado de una serie de acciones, comer sano es una de esas acciones, pero todo debe complementarse. Hacer ejercicio, manejar adecuadamente nuestras emociones y un entorno adecuado, son la fórmula precisa para alcanzar los resultados que estamos buscando.

Recuerda, consume Organic Nums y sé parte del cambio, más salud, mejor ambiente.